La
Ruta de les Foces del río Pendón se encuentra en el concejo de Nava, en las
fértiles tierras llenas de praderías y pomaradas bajo la sombra de Peñamayor.
(The route of Foces del Río Pendón is in the council of Nava, a region of apple tree meadows close to the Peñamayor mountain range. To come here, drive east from Oviedo, following the 634 road and travelling a further kilometers from Nava until the detour out to Fuensanta town.
The path starts near the Fuensanta mineral-water bottled plant. You need to cross the Pra river here, then follow the track up and turn left in the crossing to Los Fornos, not to Tablao. Continue your way up until you reach a meadow, here, you will find a mark on a post to the gorge of Pendón river.
The walking track runs parallel to a beautiful river for the most part. Finally, you will arrive to the Puente Pendón, a bridge where you can decide to do: either keep heading up to the deep forest and old meadows or turn back crossing up the bridge to Mayau Pastor. )
(The route of Foces del Río Pendón is in the council of Nava, a region of apple tree meadows close to the Peñamayor mountain range. To come here, drive east from Oviedo, following the 634 road and travelling a further kilometers from Nava until the detour out to Fuensanta town.
The path starts near the Fuensanta mineral-water bottled plant. You need to cross the Pra river here, then follow the track up and turn left in the crossing to Los Fornos, not to Tablao. Continue your way up until you reach a meadow, here, you will find a mark on a post to the gorge of Pendón river.
The walking track runs parallel to a beautiful river for the most part. Finally, you will arrive to the Puente Pendón, a bridge where you can decide to do: either keep heading up to the deep forest and old meadows or turn back crossing up the bridge to Mayau Pastor. )
Un hermoso y recóndito paraje que esconde una senda tallada en la misma roca
Es
este concejo, el navetu, conocido por la sidra, el famoso zumo fermentado de la
manzana y al cual se erige todo un museo didáctico en la capital del concejo
(MUSI, museo de la sidra).
El
punto de partida de la ruta es el lugar de Fuensanta, en el mismo emplazamiento
de la industria embotelladora de agua, antiguo balneario. A Fuensanta se llega
saliendo de la 634 a pocos kilómetros de Nava dirección Este.
(In Nava, you can enjoy the taste of the cider in some cider-bar and visit the Cider Museum placed in the village. More info. http://www.museodelasidra.com/index2.htm)
La ruta, una pequeña hermana del desfiladero del Cares
Una
vez en la planta embotelladora, se toma un camino cruzando el puente sobre el
río Pra, y tomando una senda ascendente hacia la izquierda. Al poco habrá un
cruce, donde podremos optar por el camino a Los Fornos a la izquierda y a la derecha por Tableu. Se
debe tomar el camino a la izquierda, dirección a Los Fornos. Por Tableu
bajaremos en circuito circular.
Se
sigue subiendo por entre centenarios bosques de castaños hasta llegar a una
campera (Los Fornos) con un abrevadero y una caseta; allí, indicado, se enfila
el tramo inicial del paso de las Foces, un sendero tallado en la roca en altura
sobre el río Pendón y flanqueado por murallones calizos.
Pozas y cascadas ocultas en un río de singular belleza y diáfanas aguas
Pétreo escudo con la Cruz de la Victoria y los símbolos del Alfa y el Omega en un depósito de agua
"HOC SIGNO TVETVR PIVS - HOC SIGNO VINCITVR INIMICVS"
(Con este emblema se defiende al piadoso, se vence al enemigo)
Murallones de caliza recubiertos de esponjosas briofitas y salpicados de pequeñas cascadas
Aquí un colega nuestro no se priva de remojarse, en una calurosa mañana de Diciembre
Avellanos,
robles, espectaculares vistas del río con pozas de aguas cristalinas y
desfiladeros verticales acompañarán nuestros pasos por la ruta de piedra.
En pleno Diciembre, la transparencia y fresca pureza del agua invitaba a bañarse.
(Maybe you find a deep pool fairy, here! we called them "Xanas")
El
camino continúa, a la vera del salvaje río, hasta el Puente Pendón, encrucijada
sombría en el antiguo bosque. Nosotros evitamos cruzarlo para no dirigirnos al
camino a la derecha que lleva a Tableu, ya de vuelta, y continuamos bosque
arriba a través de un escueto sendero que nos introdujo de lleno en la profusa
floresta.
Entre recónditas paredes que van y vienen, ahí abajo, el río Pendón
Al
final, el camino se va confundiendo con otros senderillos y entra en una bella
sucesión de praderías medio abandonadas, con los muros de cercado derruidos y los
restos de lo que fueron en su lejano día cabañas de pastoreo. Cruzamos varias
praderas, y justo cuando el pequeño valle se va estrechando, ascendimos por un
empinado prado hasta llegar a un bosque.
Un paisaje deshabitado e inhóspito
(Uninhabited landscape where you could see free wildfaune)
Creemos identificar, justo enfrente, a Múa
Subiendo
el bosque y dejándolo atrás, alcanzamos una zona riscosa de piedra caliza y
tojos por la que ascendemos hasta hacer cumbre, y por la cresta de la montaña,
encontramos entre los arbustos de espinos y acebos un claro donde acabamos
comiendo el ansiado bocata, que ya nos rugía el estómago.
Por un castañal con algún que otro roble
(A brief glimpse to the autumnal forest)
Lo
cierto es que nuestra intención era tomar Pico Múa, pero nos equivocamos y
ascendimos finalmente por una ladera opuesta. No obstante, es mucho mejor
intentar esta montaña (Múa) desde El Cabañón, pasando Fuensanta en coche.
Creemos
que a donde llegamos fue a algún picacho de la zona del Colla de Les Fuentes.
(¿Pico de Bomalu, quizá?)
No
nos importó. La ruta a lo largo del desfiladero sobre el río fue espectacular,
y el recorrido por el antiguo y siniestro bosque para acabar llegando a
aquellas praderías, puros vestigios nostálgicos de un mundo que ya se fue,
mereció la pena.
Dimos la vuelta a través de los cercados y bosques por los que vinimos, y retornamos al Puente Pendón. Aquí esta vez sí que cogemos el sendero al otro lado del puente y ascendemos por una pronunciada cuesta que nos lleva a una cima donde podemos ver Les Praeres de Nava, para luego descender por el bello paisaje del Mayau Pastor hasta Tablau y llegar al punto de partida.
De vuelta, subiendo al Mayau Pastor
Siniestro roble desplegado ante un mareante precipicio
(Still life in an oak over a cliff)
Personalmente
no esperaba que en la vertiente tenebrosa de la parte naveta de la Sª de
Peñamayor se encontrara este paraje casi virginal, casi olvidado, tornado en la
manifestación más pura de la Asturias profunda. Me da por pensar que, más allá
de lo que se vende turísticamente, la región posee multitud de rincones encantadores
que apenas nadie conoce fuera de la propia zona.
Rosada luna del atardecer que presagia heladas
Magníficas vistas
Yeah man! Thats the way!
ResponderEliminarey yo man Thanks!
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